Orfanato de Shanzu

... Estoy agotada... Pero es ese cansancio de los que uno quisiera tener eternamente.. Mis pies están sucios de arena y doloridos, pero de esas piedras con las que no importa tropezarse una y otra vez..

Hoy me han caído algunas lágrimas, pero de las que muchos pagarían por llorar: las de emoción feliz...

A 20 minutitos de casa, Shanzu Orphanage es una antigua casa de la ONU desde la que se repartían mercancías en lo que era antiguamente un campo de refugiados para somalíes en los años 90, a raíz de la crisis humanitaria que sufrió ese país vecino.

Ahora da para 3 clases y dos habitaciones, una para los niños y otra para las niñas, que duermen en unas pocas literas de madera, de 2 en 2 o de 3 en 3.. En total pueden albergar unos 20 nenes, aunque a clases acuden otros 35 más..

55 angelitos de 3 a 13 años que nos dan la bienvenida con una canción interpretada con entusiasmo.. Aquí mi lacrimal se ve inundado por la sensación de desmerecer tanta atención y belleza.. por suerte me repongo a los minutos, en lo que acabamos de hacer el tour por las instalaciones.. Unas 6 hectáreas de tierra en la que cultivan su propio maíz y verdes variados; lo que luego nos sirve de comida..

Hoy, al ser el primer día, hemos juntado a todos los niños en una sola clase.. Geografía, el teatro de los animales y las acciones, y la actividad favorita de todos: cantar!

El number one hit del día es la canción del pararapapa, peperepepe, pipiripipi, poporopopo, pupurupupu.. minutos de felicidad monosilábica, palmas y movimientos de cadera que dan vida a genuinas carcajadas de pequeños y grandes..

Cuando cae la noche, después de cantos, piruetas, bailes y fotos en la esplanada, Asha y Sam nos pasan a buscar para regresar a casa...